Hola chic@s! Hace muchísimo
tiempo que no escribo nada en el blog, y que mejor manera de recuperar la
costumbre que contaros una de las cosas más bonitas que me ha pasado…
Estamos esperando un precioso
bebé para mediados de noviembre! Os podéis imaginar como estamos de ansiosos y
felices por su pronta llegada.
Son muchos los sentimientos
que siento dentro de mí. Millones de dudas y miedos me invaden por la noche. Me
quiero imaginar que todas estas dudas y miedos son normales y más para una
madre primeriza. Estaré preparada? La verdad es que no lo se, pero lo que sí se
es que cariño y amor no le va a faltar jamás. Espero ser una gran madre, lo
espero de verdad.
En el momento que me enteré
de que estábamos embarazados fue un momento de subidón y a la misma vez de
miedo. Va a cambiar tanto nuestra vida??? Stay tune.
El transcurso del embarazo
esta siendo algo durillo. Quizás ahora, a menos de un mes de que nazca podría
decir que es cuando mejor me encuentro. A veces nos cuentan solo lo bonito, y
no todo es un camino de rosas…
El primer trimestre me lo
pasé prácticamente todo el día en el baño, cosa que comía, cosa que vomitaba.
Estuve súper revuelta. A eso le añadimos que desde el tercer mes llevo sin
respirar más bien nada por mi cuenta, cada 2 o 3 horas tengo que tirar de gotas
nasales, bien sea de día o de noche. Un autentico rollo. La verdad es que no
veo el día en el que por fin respire aire puro.
Luego el auténtico vaivén de
hormonas es increíble. Es alucinante como de un minuto a otro puedes pasar de
la más absoluta alegría a la máxima tristeza. Como con cualquier cosa puedes
llegar a convertirte en una autentica fiera. En esto y mil cosas más tendría
que agradecer a mi marido por esa tranquilidad y bendita paciencia que tiene.
Llegados al segundo trimestre
el estar todo el día revuelta se iba quedando atrás. Pero llegaron los ardores,
unos ardores tan fuertes que vomitaba todo. Gracias a mi médico que me receto
un medicamente que a día de hoy es raro el momento en que tengo algo de ardor.
Mi médico es un santo!
Soy una persona muy, muy
calurosa, con lo que para mi el verano ha sido una autentica tortura. Vivo en
un ático dirección sur así que imaginaros el calor que hace! Fue un autentico
infierno y soñaba todos los días con el invierno. Un invierno de frío polar
jajajaja. También tuve una ciática muy mala en la todo el muslo derecho.
Una vez en el tercer
trimestre y a raíz de que iba bajando un poco la temperatura, al menos por la
tarde-noche…. me puse las pilas a andar con mi marido. Eso fue mano de santo ya
que la ciática se me fue quitando y me empecé a encontrar mucho mejor.
Cuando ya pensé que todo iba
mucho mejor me diagnosticaron la maldita diabetes gestacional. Para mi eso fue
un mazazo en la cabeza. Yo? Diabetes? Como era posible? Pues si señor@s. Aunque
la verdad es que no está siendo tan difícil, gracias a que lo tengo totalmente
controlado a base de dieta, no tengo que pincharme insulina ni nada. Gracias a
una fuerza de voluntad que jamás pensé que tendría.
Y bueno gracias a todo esto…
siempre hay que mirar el lado positivo de las cosas…. He engordado sólo 2 o 3 kilos,
que si quitamos lo que pesa el bebé, agua etc…. Querrá decir que me veré mejor
jijiji.
Ya tenemos prácticamente todo
preparado, solo quedan algunos últimos detalles en la habitación y ya esta!
Tenemos muchísimas ganas de que nuestro chiquitín esté con nosotros.
También quería aprovechar y
agradecer a mi marido por el inmenso apoyo, cariño, paciencia y amor que me
esta dando. No podría esperar tener mejor marido y también se que será el mejor padre
del mundo!
Bueno ya os seguiré
contando!
Gracias por leer todo el rollo
que os he contado.
Besitos mil!